miércoles, 16 de noviembre de 2016

ERRENTERIA FILM

XXI FESTIVAL DE CORTOS de ERRENTERIA:
http://film.errenteria.eus/
Mejor corto joven: El canto de la reina
Directora: Inés Espinosa LÓPEZ








¡Enhorabuena a todos los premiados!

viernes, 11 de noviembre de 2016

42

No hay nadie
a quien enseñar estos poemas.
No llaméis a un amigo para ser testigo
de lo que tenéis que hacer solos.
Estas son mis cenizas.
No pretendo ahorraros ningún trabajo
quedandome callado.
Todavía no sois tan fuertes como yo.
Me creéis,
pero yo no os creo.
Esto es la guerra.
Estáis aquí para ser destruidos.

Leonard Cohen, La energía de los esclavos



domingo, 6 de noviembre de 2016

FRAGMENTO

de ANTÍFONA DEL OTOÑO en el VALLE DEL BIERZO,
Juan Carlos Mestre

LO QUE SÉ DE MÍ

Yo he nacido aquí junto a las altas lilas del verano
y los verdes racimos amargos de la aurora.

Yo he nacido entre las rosas que han muerto
y el mustio follaje de los jardines de un sueño.

En las transparentes alamedas que canta el ruiseñor
y abre el rocío con su cuchillo de cristal en la mañana.

Como la hoja que cae sobre un sepulcro
yo he pisado al nacer esta piedra y su luz me ha salpicado...

sábado, 10 de septiembre de 2016

TORTURA: El anuncio.

Sí, lo he visto.
La estrategia publicitaria debe de partir de un barrido sobre las preocupaciones de sus posibles compradores. Ahora está en marcha la guerra sobre los deberes, terrible palabra que se ha convertido en sinónimo de tortura. Y ellos la han aprovechado. Dicen que hay que salvar las cenas y luchar contra los deberes. Todo con ese aire modernetis, irreal y falso, de familias jóvenes, guapas, con casas amplísimas, cuajadas de detalles muy originales que hay que desear. Nos ponemos de vuestro lado, dicen: Os apoyamos. 
La verdadera tortura no está en los deberes, en abrir un libro de Ciencias Naturales o resolver por sí mismo un problema de matemáticas; en permitir que un niño tenga tiempo para darle a su cabeza, conseguir que se esfuerce un poco en hacer un buen ejercicio de escritura, curiosee y descubra entre sus libros cosas que hasta ahora no sabía. Ni siquiera en memorizar (oh!) un poema. La verdadera tortura es que el tiempo libre se dedique a ir (con los niños, toda la familia happy, por supuesto) de compras a almacenes abarrotados de cosas estúpidas e inútiles que, de repente, nos hacen sentir como necesarias e imprescindibles. Tomar bolsas enormes para llenarlas de artilugios que nos estorbarán durante meses (hasta tirarlos y cambiarlos por otros igual de inconvenientes). Adquirir sin parar objetos ridículos para tapar las grietas de nuestra vida, que necesitaría otro tipo de reparación. Volver a casa de mala leche después de seis horas encerrados en un gran almacén (Oh, qué bien lo han pasado los niños haciendo lo que les ha dado la gana) y dedicar el día siguiente a montar ese mamotreto extraño en medio del salón de la casa (donde apenas nos cabe), con un mal genio que podría llevarnos a declarar una guerra interna, si no fuera porque, al final, se deja (a medias) para otro día mientras, sí, cenamos todos juntos algo congelado y rápido.
Así que nos hemos convertido en revolucionarios contra la escuela, el trabajo personal, la mesa y la silla, para ser compradores persuadidos de que hay una felicidad en el hecho de abastecernos de objetos (juntos, sí, en familia, sí). Así que hay marcas que nos comprenden, que saben lo horrible que es perder el tiempo de las tardes sobre el escritorio de los niños y nos proponen una alternativa magnífica. 
Qué difícil es no seguir la corriente. Pararse a pensar y descubrir que nos engañan y, encima, nos llaman estúpidos. Nos deslumbran con ese juego de imágenes rápidas de gente guapa hasta dejarnos ciegos. Y consideran a la escuela como centro de tortura. ¡Ellos!
Yo quiero hacer deberes. Los justos, los necesarios. No quiero ir de compras absurdas ni dedicar el tiempo a montar muebles improductivos. Quiero hacer ejercicios de redacción en una mesa normal y corriente; tener espacio en mi casa. Sin estorbos. 
Comprender dónde está la trampa.
Más filosofía y menos manipulación.

martes, 30 de agosto de 2016

Heroínas de andar por casa

Muestro aquí la portada de un libro especial, que habla sobre historias de mujeres cercanas.
Lo han escrito alumnas, alumnos y profesorado del IES Arcipreste de Hita (Azuqueca de Henares) como parte del proyecto Construyendo la Igualdad. Un buen trabajo, sin duda.

viernes, 8 de julio de 2016

Festival Cine BIOSEGURA

El largometraje Tempo, del gallego Manuel Valcárcel, se alzó con el premio del Festival de Cine de Biosegura.
El premio al mejor cortometraje fue para El canto de la reina, de Inés Espinosa López.
Los accésit fueron para Recauchutados, de Carlos Caro, e Hija de la laguna, una producción peruana de Ernesto Cabellos.
Además, se entregó el Premio Biosegura, por su contribución a difundir los valores medioambientales y unos hábitos de vida sostenibles, a la profesora Teresa Moyano, que dedicó el premio a sus alumnos. 



Enhorabuena a los organizadores de esta saludable convocatoria, por ser capaces de difundir los valores de la naturaleza con actividades como esta y, por supuesto, a los premiados.
Cartel del FESTIVAL: "Mi hogar de película", de Sara Rubio.

sábado, 2 de julio de 2016

Frase del mes (pasado)

Envidio a esos hombres que de un simple gesto apagan una estrella...

Rafael Cansinos Assens, EL DIVINO FRACASO

domingo, 5 de junio de 2016

miércoles, 27 de abril de 2016

POESÍA DEL DEBER



He leído esta semana Historia de una anatomía, de Francisca Aguirre.
Me gustan las cosas bien dichas. Pensaba: evitar el romanticismo es una buena señal. Las golondrinas deben ser vistas como lo que son. Este libro parecía un buen acompañamiento para una idea como esa.
Ahora sé que es más. No evita nada, no se esconde, no se burla de las palabras comunes. Al contrario, las borda en realce.
Permite comprender la esencia de la dignidad.

LA LLAMADA DE UN RASTRO
No sucede a menudo
a veces pasa mucho tiempo
hasta que de pronto un día cualquiera
volvemos a sentirlo.

Es tan insólito tan sorprendente
que resulta difícil explicarlo.
El caso es que no es más que un rastro:
huele a cosa vivida a cosa irrepetible
huele como si estuviese amaneciendo
emana un perfume distinto
un raro aroma milagrosamente natural.
Huele a rocío y a tierra llovida.

Pero el olfato sigue ese rastro
como si caminara por una senda
que conduce a un milagro:
ese rastro termina siempre en un encuentro
un pequeño aleteo fugitivo
que nos devuelve a un tiempo de esplendor.

Llueve sobre la hierba y todo huele
a la alegre canción que entonces entonamos.
Algo que fue una vez
                              nos llama desde el tiempo.
Pero no hay forma de seguir su rastro.
La memoria se pierde en un bosque
                                  que huele a susurro y consuelo
a jazmines que alfombran el pasado
           y que nos cantan que ya todos los ríos
                                 han dado por fin con el mar.


Francisca Aguirre


lunes, 21 de marzo de 2016

FECICAM 2016





Enhorabuena a todos los que participaron, a los organizadores y a los premiados. 
Inés Espinosa se llevó el premio al Mejor Documental por El canto de la reina.

domingo, 6 de marzo de 2016

Virtudes de los pájaros


El arrendajo hace esto: además de imitar voces de otros pájaros, esconde bellotas lejos del lugar donde las recolecta. Muchas bellotas. Y las guarda no solo para los tiempos de necesidad. Las guarda porque las guarda. Nunca se sabe. Lo hace lejos de donde las encontró, como si supiera que es mejor poner distancia entre dos lugares valiosos. Algunas de esas semillas, olvidadas, crecen después y se convierten en recios robles. Así que el arrendajo, con sus manías, crea bosques fantásticos en los que luego puede ocurrir de todo.
Muchos, sin embargo, hablan mal de él. Cualquier virtud puede ser una condena.

domingo, 28 de febrero de 2016

miércoles, 10 de febrero de 2016

domingo, 17 de enero de 2016

GRANDE, Carlos

El viernes le vimos en Diógenes. Presentó su libro y obligó a Francisco José Martínez Morán a limpiarle la fama. Dice que esta Tercera Fhase es su última aparición, pero quienes le conocemos bien sabemos que no es capaz. Tal vez tarde un poco, pero Carlos Grande no es uno de esos personajes comedidos que cuando dice no quiere decir no.
La sesión fue compartida con otra poeta, Sara R. Gallardo, cuyo libro Berlín no se acaba en un círculo, recomiendo para hacernos notar que respiramos.
Grande no ha cambiado; tal vez sea un poco más bestia que al principio, un poco más menuda basura es esto, pero se le identifica perfectamente desde el primer poema, cuando lanza a su abnegado lector todo tipo de imprecaciones hasta conseguir que la vergüenza aflore a sus mejillas y se espante al comprobar lo bien que le conocen. El TÚ de Grande es casi tan enorme como el YO.
Hay que leer su libro porque, sobre todo, es una monería, de esas cosas que puedes llevar en un bolsillo pequeño y atacar, si es necesario, en cualquier parte con él a los malos bichos. La estética muy conseguida, de ciudad cargante y adocenada; la foto del autor a media luz siniestra (que no quiero decir aquí a quién me recuerda), un detalle que dice mucho de quien escribe. Marta Muñoz Cuesta le hace un regalo con sus ilustraciones. Y no solo hay que tocarlo y verlo, también hay que leerlo. No dejará a nadie indiferente, seguro. Carlos Es, en el fondo, un filósofo rastrero que no se para en mediocridades.
Aquí incluyo dos fotos, mal hechas, de su portada y su dedicatoria, y un poema: Fortaleza, para muestra.
Cuando acabó todo, ÉL ya no estaba allí, pero nos vigilaba.


fORtALezA

Nunca te muestres débil.
Si alguna vez flaqueas,   


                  qué pensarán de ti los que te quieren.